Jornada de abrazos, de emoción, de risas y mucha diversión. Este fin de semana se ha celebrado la convivencia anual de COGITI Cádiz, el Colegio Oficial de Graduados e Ingenieros Técnicos Industriales de la provincia. Después del memorable éxito del año precedente, se reunían en el mismo sitio y a la misma hora: en el impresionante Royal Hideaway de Sancti Petri, en Chiclana de la Frontera.
El Decano Domingo Villero, junto a todos los miembros de la junta directiva, ejercían de anfitriones en la llegada de los invitados a las instalaciones chiclaneras. La ilusión se multiplicaba en esta edición por las muchas caras nuevas que se han incorporado a la recién renovada Junta Directiva. Los colegiados les agradecían este paso al frente para luchar por la salud y defensa de este colectivo, de esta profesión y de esta sociedad, donde juegan un papel fundamental.
Todos se arremolinaban en el anfiteatro exterior para escuchar las palabras de Villero y su equipo, que insistían en este mensaje: somos una familia. Una gran familia. Con 1.700 miembros, COGITI ha logrado crear esa unión tan necesaria para la construcción de un futuro brillante. Todos remando, trabajando, en la misma dirección; en el bien común por encima de todo.
De ahí que estas jornadas sean tan necesarias para imprimir energía a esa fortaleza, fomentando y desarrollando este coworking de jerezanas maneras. Estrechando lazos y relaciones, compartiendo conocimientos y experiencias. Y además en un ambiente distinto, on juegos, deporte, música y los notables ingredientes de la mejor gastronomía.
Hasta el año que viene.
