El Gobierno ha autorizado un préstamo de 14.223,85 millones de euros al 0 % de interés para financiar 30 de los 31 Programas Especiales de Modernización (PEM) lanzados en 2025 en el ámbito de la defensa, sin obligación de pasar por el Parlamento.
Estos PEM abarcan equipamiento para los tres ejércitos —buques, blindados, vehículos, software, comunicaciones, satélites, ciberseguridad— y buscan elevar de forma sustancial el gasto militar español, que ha pasado del 1,4 % del PIB al 2 %.
En la práctica, tres grandes compañías concentran el grueso del préstamo: Indra, Airbus y Navantia aparecen en el 98 % de los fondos aprobados —ya sea de forma directa, mediante UTEs o por control de adjudicatarias.
- El contrato para nuevos satélites de observación que sustituirán al PAZ I recibe 1.011,85 M€ de prefinanciación, con adjudicación a Hisdesat (controlada por Indra) y la fabricación encargada a Airbus.
- La modernización del sistema de adiestramiento de pilotos (incluye 45 aviones turcos Hürjet adaptados por Airbus) tiene una prefinanciación de 1.040 M€, con un contrato estimado en 3.120 M€.
- Navantia recibe cerca de 2.300 M€ en varios PEM (principalmente para modernización de fragatas F100 de la clase Álvaro de Bazán: 1.280 M€).
El único PEM aún sin prefinanciación aprobada es el ‘Santiago Fase II’ —un programa de ciber‑electrónica, escucha y plataformas terrestres—, pero está pendiente de aprobación inminente.
Este paquete de financiación implica que el Estado se reserva la capacidad de lanzar estos programas sin pasar por el Congreso, lo cual tiene implicaciones políticas y de control parlamentario dado que algunas formaciones de apoyo al Gobierno no respaldan el aumento del gasto militar.
Plazos, requisitos y normativa relevante
- La prefinanciación aprobada corresponde a 30 de los 31 PEM lanzados durante 2025.
- Los préstamos concedidos por el Ministerio de Industria al 0 % de interés serán distribuidos “durante varios ejercicios”.
- Los contratos definitivos aún no están cerrados en muchos casos: el organismo adjudicador, Ministerio de Defensa, ha recibido la orden para negociar, pero la cuantía final de la mayoría de los contratos está pendiente.
- En muchos de los casos, las grandes empresas lideran la cadena de contratación (Indra, Airbus, Navantia) o controlan compañías menores que reciben adjudicación directa.
- No se citan normativas específicas en el artículo más allá de los PEM del “Plan Industrial y Tecnológico para la Seguridad y la Defensa de 2025”.
Contexto y efectos para el lector industrial‑técnico
Para un ingeniero técnico industrial, estos son los aspectos clave:
- Se abre una ola de equipamiento y modernización en defensa que puede traducirse en: nuevos proveedores, subcontrataciones de componentes, oportunidades de ingeniería en sistemas de arma, integración, electrónica embarcada, comunicaciones, etc.
- La concentración de la adjudicación en grandes grupos plantea que muchas oportunidades de nicho podrían derivar en contratos de segundo o tercer nivel para empresas especializadas o pymes del sector.
- El hecho de que los préstamos se otorguen sin pasar por el Congreso implica un ritmo acelerado de lanzamiento de programas, lo cual demanda capacidad técnica y de gestión de proyectos para responder pronto.
- Desde la perspectiva de cumplimiento normativo y gestión industrial, aunque no se detalla la normativa aplicable, un técnico debe prever que estos programas serán objeto de estándares de defensa, certificaciones, controles de exportación y cadena de suministro crítica.
Conclusión
El Gobierno español efectúa un viraje importante hacia la modernización de su industria de defensa mediante un préstamo masivo (14.223,85 M€) al 0 % de interés para 30 programas clave, dominados por Indra, Airbus y Navantia. Ello supone un impulso técnico‑industrial de gran magnitud con oportunidades de participación en la cadena de valor para empresas especializadas.



